Dardo Pucheta jugó en Racing de Avellaneda y de Córdoba, en Belgrano y en varios equipos de la Liga Regional Serrana de Fútbol. Con su retiro terminó la secundaria y escribió la historia que nunca se contó, la de la Liga Serrana. Acá su historia. Escribe Daniel Reinoso.
EL FUTBOLISTA QUE NO SE OLVIDÓ DEL FÚTBOL DE LA CALERA
Dardo José Pucheta, nacido en La Calera en 1958, con gran trayectoria jugando con la redonda en la Liga Cordobesa de Fútbol. Jugó en Racing de Avellaneda. Integró varios equipos de la ciudad. Después de dejar la práctica activa, culminó sus estudios secundarios, su gol más importante. Ante el desconocimiento del fútbol que se practicó en la ciudad serrana, Dardo tuvo una idea genial, escribir un libro que contará la historia de La Liga Regional Serrana de Fútbol, cuyo título es “El silencio no es olvido”.

¿Cómo fueron tus inicios en el fútbol?
Pucheta: El equipo donde yo jugaba en la Liga Regional Serrana se llamaba La Mesada, en el año 1977 se jugó un partido amistoso con Argentino Peñarol en Calera, nos ganaron por 13 a 0, me marcaba Cesar Bartolomei quien después pasó a Ferro Carril Oeste. A pesar del resultado me salieron las cosas bastante bien, es por eso que los dirigentes cordobeses me hablaron para ir a jugar a Peñarol. Fui y jugué medio año en Reserva y el resto en Primera División como titular hasta el año ’80 que me fui a préstamo.
¿A qué equipo te prestaron?
Pucheta: Es anecdótico lo que paso, yo volví de Córdoba una tarde, ya había entrenado con Peñarol y a la noche viene a casa un dirigente y me dice “Prepara tu bolso de ropa que te vas a jugar a Racing a préstamo” me sorprendió y le contestó “pero para ir a Racing de Córdoba no hace falta que lleve ropa, solo botines y canilleras”. Me interrumpe y dice “no, es Racing Club de Avellaneda”, . Eso me cambio mi vida deportiva no lo podía creer, el irme a Buenos Aires me hizo más profesional, eso fue en el año 1980. Allí fui compañero con Agustín Mario Cejas, el vasco Olarticoechea, Barbas, Calderón, Vivalda, ‘Ropero’ Díaz y Juan Ramón Carrasco recién llegado de River Plate.
Una experiencia muy linda, y eso que Racing era un caos en esa época, pero se aprende mucho como futbolista y como hombre.
¿Qué edad tenías en ese momento?
Pucheta: Yo tenía 21 años, ahora los chicos debutan a los 16, 17 años. En esa época se debutaba a los 22, 23 años.
¿Cuánto tiempo tuviste en Racing?
Pucheta: Estuve un año jugando en Racing y en el año 1981 que regreso me pide Belgrano para jugar el Nacional, y allí junto a Reinaldi, Beccerica, Carballo, Miño, Bosio, Santechia, Patuelli, Rotondi y Da Fonseca que venían de Vélez.
¿Cuándo se fusionó Peñarol y Huracán, vos jugaste en ese equipo?
Pucheta: Sí jugué, en la Alianza San Martín en el año 1979 antes de ir a Racing. Gran equipo se armó, jugaba Almada, Ortiz, Torletti, Álvarez, Pucheta, buena delantera. Eliminamos a Belgrano en semifinales con gol de Daniel Alvarez 1 a 0 y después perdimos con Unión San Vicente, el mejor Unión que vi.
Una lástima la disolución de la Alianza, en esa época representaban a mucha gente de la zona norte de la ciudad. Hoy sería un grande de Córdoba.
¿Jugaste en Estudiantes de Río Cuarto?
Pucheta: Así es, jugué el Nacional del 83 para Estudiantes de Río Cuarto, junto al Hacha Ludueña.
Al comparar las épocas en la parte física-técnica ¿qué observas?
Pucheta: Yo veo mucho fútbol local, nacional e internacional y llama la atención que un jugador talentoso gambetee tres o cuatro rivales. En mi época eran muy comunes esas jugadas, veías varias por partido. Cuando jugué con Reinaldi en Belgrano, me impresionó la calidad que tenía para ocupar espacios, el recibía siempre libre, poseía muchísima virtud aparte de ser un excelente jugador.
Compartí cancha con muchos “Diez” de calidad como el pato Gasparini, Carlitos López, pero tuve uno especial; Víctor Cepeda, él me decía “pibe cuando yo reciba la pelota voy a mirar hacia la derecha y voy a nombrar al wing derecho, como si fuera hacer un cambio de frente, cuando vos sientas eso, pica porque de revés yo te habilito a vos”. Víctor Cepeda un excepcional jugador. Ahora todo es más físico, el jugador que no está preparado atleticamente no puede jugar, te pasan por arriba.

Cuando vos jugabas lo hacías a estadio lleno en la Liga Cordobesa, y ahora no es así.
Pucheta: Sí, nosotros jugábamos a estadio lleno y eso eran todos los partidos, de local o visitante. Yo ahora veo una cancha vacía, no puede ser que un partido entre Peñarol y Las Palmas se juegue sin público visitante.
Entiendo que las recaudaciones de hoy no cubren los gastos, está muy despreciada la Liga. Es inconcebible.
Dardo, compartiste cancha con Diego Maradona.
Pucheta: Tengo la gran satisfacción de haberlo enfrentado en un partido preparatorio para el Mundial Juvenil 1979 a jugarse en Japón. Fue una satisfacción muy grande enfrentar a Diego, Ramón Díaz, Barbas, Meza, Simón, Carabelli, Escudero, Rinaldi, Rossi… todos crack
¿Siempre jugaste como wing izquierdo?
Pucheta: Siempre jugué por la izquierda, aun siendo diestro eso es lo que te da el potrero, la facilidad para moverte en varios sectores de la cancha. Bien de punta y bien abierto.
Te explayaste en tu trayectoria futbolística pero sabemos que tienes una faceta muy importante que es la de escritor, sobre eso Dardo coméntanos cómo llegaste a escribir un libro, ¿tenías algo pendiente en tu vida, que no sea lo futbolístico?
Pucheta: Mira yo nunca terminé el secundario, abandoné los estudios por el fútbol, no me daban los tiempos y cuando dejo de jugar al fútbol, una Directora llamada Estela Coca me insistía para terminar los estudios, yo había abandonado en 5° año Bachiller. Tantas veces me insistió que acepté y complete el quinto año asistiendo todos los días a clase como alumno regular. Cuando me recibí, al diploma me lo entregaron mis hijos y allí me di cuenta de la importancia que tenía.

¿El terminar el secundario te potenció esa idea de investigar y escribir?
Pucheta: Siempre tuve la inquietud de averiguar y conocer cosas del pueblo y en este caso el fútbol de la Liga Serrana. En Córdoba estaba en reunión con amigos y alguien me pregunta si en Calera se jugaba al fútbol, eso me tocó y mucho, y le dije: “No te imaginas la calidad de fútbol que había en Calera”. Esa pregunta me despertó el interés de hacer conocer la historia de nuestro fútbol.
Y allí empecé a indagar sobre los acontecimientos, era una lucha porque ya había gente que no estaba, entonces hable con los hijos, nietos, me daban información y también algunos tenían fotos y eso era muy importante. Siempre digo que las historias de los pueblos nunca deben olvidarse o perder. Cuando yo inicio las primeras escrituras del libro lo hago sobre la historia de uno de los equipos, en este caso La Juventud de Saldan. Busco la ayuda de alguien que conoce del tema como el Sr. Antonio Leal escritor que vive en Saldan. Leo lo escrito sobre el equipo de Juventud de Saldan y por su rostro me di cuenta que no lo convencía, cuando terminó le muestro fotos una cantidad aproximada de 35 del campeonato, entonces me dijo “dale para adelante”.
Si hablas de una historia de hace 70 años pero sin fotos es poco creíble, pero con fotos ya es otra cosa, certificas con imagen lo que vos narras. Tarde 4 años en escribir ese libro, el cual fue declarado de interés municipal, fui a la Universidad a exponer sobre el mismo, en la presentación se hicieron presente más de 130 personas, todo un suceso. No gané en lo económico, pero si me dio grandes satisfacciones porque hubo mucha gente que figura el nombre en el libro y eso tuvo mucha repercusión.
Daniel Reinoso