La semana pasada cumplió 54 años Fernando Gabriel Cáceres. Una carrera admirable: Argentinos, River, Boca, Independiente, Selección Argentina y fútbol español. Lo balearon en un asalto en 2009 ahí sigue enseñando fútbol y contagiando sus ganas de vivir. Siempre con la idea clara del deporte como un espacio de inclusión social. Escribe Federico Abbiati.
Un sin fin de personas en esta vida pueden con total veracidad afirmar que han renacido, que la vida las ha rescatado de la más profunda agonía para darles la oportunidad de seguir adelante. Si este renacer significa oportunidad o calamidad, dependerá pura y exclusivamente de la lente con la que cada uno de esos seres humanos pueda procesar lo acontecido.
El caso de Fernando Gabriel Cáceres, el prestigioso “Negro”, sin dudas que personifica a la perfección lo aseverado párrafo arriba. Recio marcador central surgido en Argentinos Juniors, tuvo el privilegio de vestir, además, las camisetas de River, Boca e Independiente.
En 1993, tras solo una temporada en Núñez, pegó la zancada hacia España. Más precisamente al Real Zaragoza, donde fue pieza activa para el logro de la Recopa Europea 1995 (2-1 en Parque de los Príncipes contra el por entonces vigente campeón Arsenal). Volvió a la Argentina en 1996 para jugar en el Boca de Bilardo. En 1997 retomó el periplo español, primero pasando por el Valencia y luego por el Celta de Vigo, donde estuvo hasta 2004 y regresó a nuestro país, esta vez para recalar en el “Rojo” de Avellaneda.
A nivel selección, Cáceres se consagró campeón de la Copa América 1993, disputada en Ecuador y con el mismo Alfio “Coco” Basile como técnico, fue titular en Estados Unidos 1994. Pero tal vez, lo que termina de redondear cualquier concepto sobre el “Negro” dentro de la cancha es que ya en México 1986, con sólo 16 años, fue sparring del consagrado equipo de D10S y el “Narigón”.
En 2006 Cáceres colgó los botines sin saber que el partido más bravo de su vida todavía no lo había jugado. Es que la madrugada del primero de Noviembre de 2009, el “Negrito” y su pareja fueron asaltados en Ciudadela por un grupo de menores de edad, llevándose, el ex defensor, la peor de las brutalidades, al recibir cuatro disparos: uno de ellos le provocó la pérdida de su ojo derecho, otro le perforó la base del cráneo.

Un año es lo que estuvo internado el “Negro”, elevándose para despejar cada avance que la “parca” esbozaba en contra de sus ganas de vivir. Más que “partido de la vida”, podemos corregir hablando de ese año como el de “la temporada de su vida”; a cuyo final Cáceres volvió a campeonar una vez más. Esta vez solo, sin los 10 compañeros de costumbre. Solamente él y sus ganas de vivir.
Han pasado 13 años de esa fatídica madrugada, 12 desde que el “Negrito” pudo dejar la clínica. Hoy se desempeña como DT en las infantiles del “Bichito” y el Fernando Cáceres Fútbol Club es ya una realidad que jugó el Regional Amateur 2019 (ex “Torneo Argentino B”). Pero los éxitos pasan por brindarle contención a los pibes, un espacio de inclusión y superación personal. Tal como lo dijo el “Negro” cuando se manifestó en contra de la baja en la edad para la imputabilidad penal: “A los pibes que delinquen, incluso a los que me balearon, se los corrige con alimentación, deporte, estudio y trabajo. Hacinarlos al calor de una celda es nuestro peor fracaso como sociedad.”
En enero volvió al estadio de Independiente a ver unos amistosos del «Rojo» contra Tigre. Habló con los jugadores, charló un rato con el técnico Leandro Stillitano y del club le dieron una remera homenaje.
El martes 7 de febrero pasado Fernando Gabriel Cáceres ha contado hasta 54. Y cuando parece que ya nada más le puede pedir a la vida, entonces se sigue esforzando día a día por un título más: el de poder volver a caminar sin andador ni bastón.
Federico Abbiati
Twitter: @FedericoAbbiat1